Despierto y volteo a verte - no estás - te busco en el cuarto con la mirada y veo la puerta cerrada, cierro los ojos nuevamente y retiro las múltiples almohadas a mí alrededor con intención de levantarme pero a cada movimiento encuentro más cómoda la cama y me acomodo nuevamente.
Pasan unos segundos... abro los ojos una vez más y esta vez te veo a mi lado - sonríes - y me das los buenos días con un beso, no dices nada pero sonríes, y tocas el cabello y yo te observo como si nunca te hubiera visto antes, te observo con ojos de niña y te siento cerca - me rio - y me das un beso, uno más... y me miras con la mirada de un ángel, de un ángel enamorado.
Dices - ¡Hola! - y yo sonrió como cada mañana... como cada mañana desde que estoy a tu lado y me despiertas de esa manera, tan silenciosa y con mucha magia... y yo sonrió y soy feliz tanto o más desde que te conocí, porque en tus brazos, descubrí, no me hace falta nada.. Me abrazas y segundos después iniciamos nuestro día... *
DMDG
No hay comentarios:
Publicar un comentario